A fines de mayo, el gobierno de Juan Orlando Hernández (JOH) anunció reformas encaminadas a privatizar los servicios, mediante la aprobación de la Ley de Reestructuración y Transformación del Sistema Nacional de Salud y Educación.

Las calles de Tegucigalpa volvieron a estallar ante la amenaza de despidos masivos de médicos y maestras, y para denunciar el estado generalizado de corrupción política y represión militar-policial en Honduras.

Por estos días, la Plataforma en Defensa de la Salud y la Educación Pública protagoniza las masivas movilizaciones y paro de actividades en la capital del país, Tegucigalpa, en la segunda ciudad más importante del país, San Pedro Sula, en Comayagua y otras regiones.

El 75 por ciento de los centros educativos están destruidos, denunció Ovenir Flores, vicepresidente del Colegio Profesional Superación Magisterial Hondureño a Telesur. En el sistema de salud, los niveles de corrupción en el área han alcanzado un 49 por ciento, según el Consejo Nacional Anticorrupción.

“El Estado se ha convertido en una entidad punitiva y represiva”, señaló el reconocido defensor de derechos humanos Dr. Juan Almendarez a Radio Mundo Real.

Ante un fuerte clima de criminalización de la juventud y de la pobreza, el pueblo se manifiesta de todas formas, dice este médico.

El lunes 3 de junio, el gobierno anunció que derogaba los decretos que privatizarían los servicios. Sin embargo, desde la Plataforma desconocen a los firmantes que figuran en el acuerdo con el Gobierno, pues a esa reunión no asistió ningún representante de la organización.

Vale decir que territorios garífunas han sido atacados desde helicópteros por fuerzas militares. “Es una guerra contra el pueblo”, dice Almendarez.

Ante un gobierno “sumiso a los intereses imperiales, el pueblo se manifiesta a pesar de la represión”. “Aquí manda el Comando Sur y se persigue a defensores de derechos humanos”, dijo Almendarez.

El médico consideró que el pueblo ha emigrado masivamente a Estados Unidos, también como forma de protesta, además de resistir desde las comunidades: “No se puede negar que éste es un pueblo heroico”.

A todo esto, el 30 de mayo, la Agencia Antidrogas de Estados Unidos (DEA) reveló que en 2013 abrió una investigación por tráfico de drogas y lavado de dinero en la que incluyó a Juan Orlando Hernández.