«En el COPINH se fortaleció la participación de jóvenes y de a poco vamos teniendo nuevos liderazgos. Cada día queremos aportar en cómo no replicar en la juventud los vicios organizativos que pueden tener las organizaciones sociales», afirmó Bertha Zúniga Cáceres [1], coordinadora general del Consejo Cívico de Organizaciones Populares e Indígenas de Honduras (COPINH) en este sexto aniversario del asesinato de su madre, Berta Cáceres, cometido el 2 de marzo de 2016 por sicarios [2] contratados por miembros de la empresa DESA como David Castillo [3].
A seis años del femicidio político y territorial de Berta Cáceres [4], Radio Mundo Real quiere recordarla a través de voces jóvenes: Dunia Sánchez y Dania Hernández nos cuentan qué aprendieron de la defensora lenca, qué inspiración les dejó, cuál creen que es su legado para las generaciones más jóvenes y qué luchas las movilizan hoy.
Dunia Sánchez es defensora de Río Blanco y realiza trabajo comunitario en COPINH. Dania Hernández vive en el municipio de Intibucá y también integra el COPINH.
«El legado que Berta nos ha dejado a nosotros los jóvenes es seguirnos formando, es seguir articulando, es seguir transformando, mirando a Honduras. Si no nos organizamos, si no luchamos como jóvenes, Honduras va a seguir siempre fracasado. Debemos capacitarnos sobre la importancia de defender nuestros territorios ancestrales movilizándonos, luchando y exigiendo nuestros derechos al agua y al territorio. Debemos defendernos ante las violaciones a los derechos que se hacen en nuestros territorios, cuando entran con proyectos extractivos, mineros, y cualquier tipo de proyectos que nos llevan a despojar, a violentar, a asesinarnos a compañeros y a darles mucha persecución», afirmó Dunia Sánchez.
«Yo nací en el COPINH, al igual que muchos niños y niñas. Hay una cosa que sí me encantaba era escuchar el programa de la organización, que se llama Ecos de Opalaca, y en ese programa justamente hablaba Bertita y recuerdo que me gustaba escuchar este programa porque cada vez que Bertita hablaba lo hacía con una energía, era una cosa que se transmitía a través de la radio como ese espíritu de lucha, esa necesidad luchar, de tener empatía con lo que estaba pasando en los distintos territorios, en las comunidades. Berta es y seguirá siendo una persona muy importante en la lucha de los pueblos en la defensa de la vida», dice Dania Hernández.