Bajo la consigna “No en nuestro nombre», el Foro Feminista contra el G20 realizó charlas y otras intervenciones públicas en repudio al W20 los días 1º y 2 de octubre en la plaza frente al Congreso argentino. Estos encuentros son previos a la decimotercera reunión del G20 que se realizará en la ciudad de Buenos Aires, del 30 de noviembre al 1º de diciembre de este año.
El W20 (Woman 20, por sus siglas en inglés) es uno de los 7 grupos de afinidad del G20, cuyos representantes oficiales y organizaciones a cargo son designados por el gobierno anfitrión. La Cumbre de este grupo de mujeres empresarias se llevó a cabo del 1º al 3 de octubre y es un espacio de carácter no vinculante, auspiciado por empresas transnacionales.
Uno de los ejes del W20 reconoce la capacidad de las mujeres en agricultura familiar y la producción de alimentos, pero en la mesa sobre agricultura familiar no hubo ni una representante de las mujeres rurales y, en cambio, sí estuvo presente una de la Coca-Cola. Además, se omitió denunciar que las mujeres están siendo amenazadas y desplazadas de sus territorios de vida, tanto por los ajustes del Estado que se aplican en este gobierno, como por las empresas privadas que contaminan los territorios y acaparan tierras, informaron desde Amigos de la Tierra Argentina (ATA) [1].
El W20 incluyó debates sobre inclusión laboral, financiera y digital, “pero no aborda las raíces estructurales de las desigualdades sumadas a la flexibilización laboral y el desguace del Estado, impulsado por países neoliberales líderes del G20 y por supuesto el FMI”, agregaron desde ATA.
Durante el primer día del Foro Feminista contra el G20, la periodista feminista Liliana Daunes dio voz al manifiesto [2] conjurado por la diversidad de activistas que sostienen ese espacio de lucha contra el ajuste y la represión neoliberal.
Algunos fragmentos del manifiesto cuestionan: “¿Qué llena una olla feminista? ¿Qué cocemos en las plazas de nuestros barrios, en nuestras casas, al costado de las rutas, en las entrañas de nuestras organizaciones? ¿Quiénes se sientan a nuestra mesa?”
“Nos conjuramos contra el neoliberalismo de las empresarias del W20. Desafiamos la meritocracia y la idea de desarrollo del G20. Repudiamos su idea de inclusión a un mercado laboral a merced de las empresas transnacionales, la acumulación del capital y el poder financiero”. Insistimos en transformar aquellos aspectos del mundo que el capitalismo nos propone como ineludibles. Desnaturalizamos las relaciones de poder que nos oprimen”.