En una Capital Federal argentina armada hasta las baldosas, con helicópteros y partidas militares zurcando el plomizo cielo del país sudamericano, las únicas voces que se escuchan por encima de las sirenas son la de las organizaciones sociales que elevan su crítica a la Cumbre del G20 y al retorno del neoliberalismo en la región.
Este acelerado retorno ha significado asimismo la pérdida de derechos adquiridos por los pueblos en la última década y media. Su bandera es la del Fondo Monetario Internacional y sus políticas de ajustes y endeudamientos. Y su cara visible es la de Mauricio Macri en Argentina, anfitrión del cónclave de las principales economías del Planeta, Jair Bolsonaro quien asumirá el gobierno de Brasil en enero próximo y Donald Trump y su política unilateral y guerrerista.
Con la mayoría de las dependencias públicas cerradas, la población huyendo de la ciudad autónoma a instancia de las propias autoridades de gobierno y las sedes de las multinacionales más emblemáticas del capitalismo global “camufladas” para evitar ser blanco de las acciones de protesta, este viernes 30 se aguarda una gran marcha de rechazo a la agenda del G 20 y sus personeros.
RMR se sumó a la cobertura de las acciones previas que se concentraron en la Plaza de los dos Congresos, en el corazón porteño y a escasas cuadras de Casa Rosada, sede del gobierno argentino y por donde algunos de los dignatarios desfilaron en las horas previas al encuentro.
En el mediodía de este jueves, la integrante de Madres de Plaza de Mayo Línea Fundadora, Hebe de Bonafini, se encontraba junto a sus compañeras, reclamantes del destino final de sus hijos detenidos desaparecidos, en Plaza de Mayo. Desde hace décadas esta organización realiza una marcha semanal en ese emblemático público como relamo incesante de información sobre sus seres queridos desaparecidos por la dictadura militar (1976-1983).
“Al no reconocer la muerte de nuestros hijos, venimos aquí cada jueves a reencontrarnos con ellos, lo sentimos en el cuerpo”, dice Hebe. EL dispositivo de “seguridad” buscó evitar el ritual de las madres en las vísperas del G20, pero ellas lo cumplieron una vez más.
En tanto, la economista Beverly Keene, de Jubileo Sur, entregó algunos conceptos sobre el sgnificado de esta Cumbre del G 20 para la Argentina actual.
Para la activista, la “toma” de la ciudad por párte de las fuerzas de seguridad y su vaciamiento tiene que ver más con identificar la protesta con la violencia que con “proteger” a los mandatarios.
Y dijo la elección de Argentina como sede del G20 busca ejemplificar que, con Macri y el neoliberalismo, “Argentina volvió al mundo: el mundo de las trasnacionales y especuladores”.
Escucha en audio adjunto el Informe Especial de nuestros enviados a Buenos Aires
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