“Las comunidades del Sur global son golpeadas por los impactos del cambio climático y la energía sucia hoy mismo. No es una cuestión del futuro, es una cuestión de nuestra sobrevivencia ahora”, advirtió el miércoles la ambientalista Sara Shaw, de Amigos de la Tierra Internacional (ATI) [1].
“Participaremos en las movilizaciones que inician este viernes para apoyar a las comunidades que padecen el cambio climático en la actualidad”, agregó la coordinadora del programa de Justicia Climática y Energía de esa federación ambientalista, en diálogo con Radio Mundo Real.
Este viernes inicia una semana de acción mundial por el futuro y la justicia climática, que verá actividades en unos 150 países y que podría transformarse, de acuerdo a las expectativas de los organizadores (una gran diversidad de actores sociales), en la mayor protesta mundial contra la inacción frente al cambio climático. El punto máximo será el 27 de septiembre, día para el que se convoca a una Huelga Mundial por el Clima.
Asimismo, también del 20 al 27 de este mes se prevén las acciones del movimiento “Reclaim Power”, que aglutina a movimientos sociales, redes internacionales, organizaciones no gubernamentales, entre otros, contra la energía sucia y por el derecho de los pueblos a la energía, pública, renovable y controlada por las comunidades.
Sara Shaw dijo que ATI apoya las movilizaciones del 20 al 27 de septiembre [2] de quienes están muy preocupados por la crisis climática y destacó que los grupos de Amigos de la Tierra en Alemania, Reino Unido, Estados Unidos, El Salvador y Japón, entre otros países, realizarán actividades.
Las protestas a nivel mundial coincidirán con la Cumbre sobre la Acción Climática convocada por el secretario general de Naciones Unidas (ONU), António Guterres, para el 23 de septiembre en Nueva York, Estados Unidos. El objetivo de esa instancia oficial es que los gobiernos incrementen sus contribuciones nacionales de reducción de emisiones contaminantes para 2020, para detener el cambio climático.
ATI alerta que no tiene expectativas de que eso realmente ocurra en Nueva York. “Probablemente escuchemos grandes discursos de mucha gente, pero es poco probable que veamos la respuesta que se necesita a la crisis climática en esta cumbre”, dijo Shaw. La ambientalista lamentó además que se hable solo de mitigación del cambio climático (reducción de emisiones), y no de la adaptación y el financiamiento, tan importantes para los países que ya padecen los efectos de esa crisis y necesitan desarrollarse con patrones limpios.
No obstante, habrán representantes de ATI, de Uganda y Nigeria, en la cumbre citada por el secretario general de ONU, para llevar las voces de los afectados por el cambio climático y la energía sucia.
Por su parte, el ambientalista Ricardo Navarro, de CESTA – Amigos de la Tierra El Salvador, manifestó a Radio Mundo Real que “es importante que se reúnan los líderes porque son los que van a tener que tomar decisiones, pero como que están fuera de foco”. Explicó que es claro que no se puede seguir emitiendo más gases de efecto invernadero y que, sin embargo, los gobiernos cuando se reúnen buscan alternativas que en realidad no atienden la crisis. Los estados negocian sobre “cómo hacer algunas modificaciones, o si le ponen un poquito más de impuestos al carbono, o si ven cómo lo absorben… Pero el asunto es que no estamos cuestionando las causas fundamentales del problema, que es el mismo sistema político económico”.
Navarro agregó que la humanidad padece también una gravísima crisis de la biodiversidad. [3] “Nosotros estamos hipotecando el futuro”, advirtió.
En tanto, la activista Hanae Takahashi, de Amigos de la Tierra Japón [4], manifestó que espera que los gobiernos incrementen sus contribuciones nacionales para la reducción de emisiones y demandó al gobierno de su país que aumente su nivel de ambición. “Una cosa que Japón puede hacer es duplicar los fondos que otorga para el financiamiento climático”, dijo. Takahashi también relató los planes para las movilizaciones de los próximos días.
Consultado sobre las soluciones a la crisis climática, Navarro dijo que “urge cambiar todo el sistema político económico ideológico del planeta”. “Urge”, repitió. Y consideró que es fundamental la unión de los diversos grupos sociales, como feministas, campesinos, ambientalistas, sindicalistas, entre otros actores, para impulsar esos cambios. “Me siento muy optimista cuando vemos que en ATI tenemos buenas relaciones con Vía Campesina, con la Marcha Mundial de las Mujeres, con los trabajadores, y otros grupos ambientalistas por supuesto”, señaló Navarro.
En tanto, Shaw aseguró que se necesita un cambio de sistema radical, soluciones reales, el abandono mediante una transición justa de los combustibles fósiles y de las falsas soluciones, como la energía nuclear, las grandes represas, los agrocombustibles y las incineradoras de residuos, entre otras formas de energía sucia.