La Organización Mundial del Comercio (OMC) junto a un conjunto de acuerdos de libre comercio, de protección recíproca de inversiones, multilaterales y bilaterales, son el sustento a los niveles inéditos de desigualdad en la economía global, dice la federación campesina al conmemorarse este 10 de setiembre el Día Internacional de Lucha contra la OMC y los Tratados de Libre Comercio en el que los movimientos sociales se movilizaron.
“Organismos internacionales como la OMC, el Banco Mundial y el Fondo Monetario Internacional (FMI) que promueven directa e indirectamente una serie de acuerdos comerciales bilaterales y multilaterales, han creado un nivel criminal de desigualdad en este mundo, donde según los informes, el 82% de la riqueza mundial está actualmente controlada por el 1% de la población”, indica La Vía Campesina [1] en su llamado a la movilización.
“El hambre mundial está aumentando de nuevo y la Soberanía Alimentaria de los pueblos está bajo una grave amenaza. Esto es el resultado de una presión persistente, durante siete décadas, para adoptar políticas neoliberales, que promueven regímenes de “libre comercio” en todo el mundo”, agrega. “La privatización y la desregulación que surgieron como consecuencia han enriquecido a los ricos, mientras que la pobreza y el hambre en el mundo continúan a niveles cínicamente altos”.
La Vía Campesina considera y condena estos niveles de desigualdad como “un delito imperdonable” que cuestiona la existencia y legitimidad de estas instituciones de control comercial y financiero globales, así como los paquetes de acuerdos y pactos que promueven. La razón es simple: su historial muestra que accionan en beneficio de las corporaciones y no de los pueblos. Ni mucho menos al planeta y su sostenibilidad.
Economías, territorios y hasta el propio clima son así víctimas de la OMC. #OMCmata y #WTOkills fueron algunas de las etiquetas empleadas por parte de las organizaciones en esta fecha.
“Todo lo que estos acuerdos han garantizado es la libertad de las corporaciones multinacionales para el dumping de alimentos baratos a países económicamente más débiles, después de haber recibido grandes subsidios de sus gobiernos ricos. Esto, unido a un impulso para un sistema agrícola industrial es la causa de que los granos alimenticios sean vistos como productos con los que hay que especular y comerciar, con campesinxs y agricultorxs familiares que no pueden siquiera cubrir el costo del cultivo. Todo ello ha destruido las comunidades campesinas y ha arrasado con los mercados de los pescadores, pescadoras, campesinas y campesinos. El aumento de la privatización de los servicios ha aumentado el costo de la vida, mientras que los niveles de ingresos de los hogares campesinos se han desplomado. La deuda resultante ha empujado a millones de hogares campesinos a contraer una deuda profunda” dice La Vía Campesina Internacional.
Este sistema de agricultura industrial promovido por el “trío criminal de la OMC, el Banco Mundial y el FMI”, continúa diciendo La Vía Campesina, ha llevado a la consolidación y el control de la cadena alimentaria mundial en manos de algunas corporaciones del agronegocio, “creando un impacto devastador para el planeta, su gente y todas las especies vivas”.
La fecha
El 10 de setiembre fue adoptado como Día Mundial de Lucha contra la OMC, el Banco Mundial y el Fondo Monetario tras que en 2003, un campesino arrocero surcoreano, Lee Kyung Hae, se quitara la vida fuera de la reunión ministerial de la OMC en Cancún, México. Mientras sacrificaba su vida para exponer los crímenes de la OMC y los acuerdos de libre comercio, Lee sostenía una pancarta que decía “La OMC mata a los campesinos”.
“Desde ese día, hemos tomado la fecha del 10 de setiembre para conmemorar el Día Internacional de Lucha contra la OMC y los Acuerdos de Libre Comercio, movilizando a nuestros miembros contra el asalto del capitalismo global y los regímenes de mercado libre. Hemos denunciado a la OMC en todas las reuniones ministeriales celebradas desde entonces mediante acciones directas”.
En la actualidad, dicen los campesinos de La Vía Campesina, “varios acuerdos bilaterales y multilaterales como RCEP, CPTPP, UE-Mercosur, CETA y otros se están negociando frenéticamente por países y organismos mundiales a puertas cerradas, sin respetar la democracia y la soberanía nacional”.
Vidas e instrumentos
Tchena Masso de La Vía Campesina dijo a RMR que la lucha contra la OMC y sus órganos satélites “no es más que la propia lucha por la vida” que el “libre comercio trasnacional” amenaza.
En entrevista desde Brasil, la integrante del Movimiento de Afectados por las Represas (MAB) vinculó esta fecha significativa para el conjunto del campesinado con las cercanas acciones en Ginebra, más precisamente en el Consejo de Derechos Humanos, buscando un instrumento legal que ponga límite al accionar de impunidad de las corporaciones trasnacionales.
En el caso de Brasil, que enfrenta elecciones con un candidato popular secuestrado y que desde 2016 sufre un quebranto institucional tras el golpe que destituyera a Dilma Rousseff, el gobierno de Michel Temer, por ejemplo, creó una institución financiera con sede en Estados Unidos para favorecer la instalación de empresas en Brasil.
Escucha la entrevista en audio adjunto.
#OMCMata [2] #10Septiembre [3] – Día Internacional de Lucha contra la #OMC [4] y los Tratados de Libre Comercio- Menos de 20 transnacionales controlan actualmente la cadena alimentaria mundial que dicta qué alimentos compramos y cómo lo hacemos. https://t.co/6XXDmHZ0T7 [5] pic.twitter.com/9CK9h0fBfT [6]
— La Vía Campesina Español #SoberaniaAlimentariaYA (@via_campesinaSP) September 10, 2018 [7]