“Hay una evaluación en común, no solo de parte de la sociedad civil, los movimientos sociales o los pueblos, de que el sistema multilateral ha fracasado y no está brindando soluciones a los problemas mundiales y comunes”, afirmó Gonzalo Berrón, representante del Transnational Institute (TNI) [1]. “Debemos reformar la ONU”, añadió en una entrevista con Radio Mundo Real.
Un grupo conformado por varios movimientos y organizaciones sociales que reclaman un nuevo multilateralismo al servicio de los pueblos y el planeta, organizó un encuentro [2] en Nueva York, Estados Unidos, del 19 al 21 de septiembre, previo a la Cumbre del Futuro de las Naciones Unidas [3] en esa misma ciudad (22 y 23 de septiembre).
Las organizaciones denunciaron [4] graves intentos en el proceso hacia la Cumbre del Futuro para restablecer una agenda empresarial que ya había sido rechazada por Estados y organizaciones sociales. Alertaron que el fin de esa intentona empresarial era imponer la idea de que la sociedad civil organizada quería permitir que varias partes interesadas, entre ellas actores privados con intereses especiales, estuvieran presentes en las reuniones oficiales. Por el contrario, los movimientos sociales presionaron a favor de una reunión de gobiernos, representantes de los pueblos.
Antes del comienzo de la Cumbre del Futuro, las organizaciones que presionan por un sistema multilateral verdaderamente democrático advirtieron que la ONU no ha estado brindando soluciones reales para crisis tales como el cambio climático, pandemias, catástrofes naturales, genocidios, guerras y cada vez más desigualdad. “La gobernanza mundial es dominada por los intereses de las grandes empresas, perpetuando un sistema que pasa por alto las necesidades de la mayoría, particularmente en el Sur Global”, afirmaron [5]. “La Cumbre del Futuro que se celebrará en breve amenaza con convertirse en un ejercicio más para mantener el statu quo”, habían advertido.
Una vez finalizado el encuentro de los pueblos y la Cumbre del Futuro, Radio Mundo Real entrevistó a Gonzalo Berrón para saber más sobre lo que sucedió en ambas reuniones y preguntarle cuáles son sus evaluaciones.
Según el activista argentino que reside en Brasil, los movimientos y organizaciones sociales que luchan por un nuevo multilateralismo tuvieron dos intenciones principales en Nueva York: compartir sus reflexiones en pos de una comprensión común acerca del fracaso de las instituciones de la ONU provocado por la cooptación empresarial, y evaluar las posibles acciones para hacerle frente a esto.
“Nuestras/os colegas y activistas de los diferentes sectores enfrentan los mismos problemas: promueven los derechos, los servicios públicos y el acceso a los bienes comunes, pero enfrentan el desafío del poder de las grandes empresas y sus intereses, que impiden el logro de los Derechos Humanos”, dijo Berrón a Radio Mundo Real.
“Hay una evaluación común, no solo de parte de la sociedad civil, los movimientos sociales o los pueblos, de que el sistema multilateral es un fracaso y no está brindando soluciones a los problemas mundiales o comunes”. Acerca de los resultados de la Cumbre del Futuro, Berrón agregó: “El Pacto para el Futuro, que es el núcleo de los tres documentos que se acordaron estos días, no avanza en la búsqueda o materialización de las soluciones para estos problemas mundiales. Es decepcionante, porque mantiene el statu quo y ese statu quo no es bueno para los pueblos ni el planeta”.
El representante de TNI admitió que el Pacto Digital Global, un segundo documento negociado en la Cumbre del Futuro que aborda en gran medida el problema de cómo manejar los aspectos digitales y de Internet, logró un pequeño avance, “pero no todo lo que hubiéramos querido”. Las asimetrías en materia del acceso al mundo digital solo se abordaron parcialmente, se lamentó Berrón.
El último documento, la Declaración sobre las Generaciones Futuras es, de acuerdo con el activista, un llamado de atención para que las autoridades y Estados tengan en cuenta que las acciones que adopten hoy en día tendrán un impacto en las generaciones futuras, algo que tiene que considerarse al desarrollar políticas. “Sí, es interesante, pero es sólo una declaración. No va a cambiar las cosas realmente”.
Berrón no tiene dudas: “Debemos cambiar la ONU. […] Desde nuestro punto de vista, tenemos que impedir la cooptación empresarial de la ONU, la influencia excesiva del poder económico, las grandes empresas transnacionales y las instituciones filantrópicas, que están impulsando en realidad políticas que son beneficiosas para ellos mismos”.
Pero también necesitamos una reforma institucional, agregó el integrante de TNI. “La ONU tiene algunos mecanismos que hacen que no sea para nada democrática, principalmente el poder de veto. Existen diferentes categorías de Estados, pero la democracia requiere que todas y todos seamos iguales y tengamos el mismo poder. Aquí no sucede eso y se están obstaculizando los caminos hacia las soluciones”. Los Estados poderosos que tienen poder de veto “hacen lo que quieren, y eso no sólo se expresa en términos geopolíticos, sino principalmente en términos económicos”.
De todas maneras, los movimientos y organizaciones sociales presentes en el Encuentro de los Pueblos en Nueva York están comprometidos a seguir denunciando y presionando contra la cooptación empresarial de las instituciones de la ONU. Existe una necesidad urgente de un debate sistémico sobre cómo debe reformarse el sistema multilateral, evaluó Berrón. Hay muchas ideas sobre la mesa, pero también hay un acuerdo general: se necesita urgentemente un sistema multilateral democrático para los pueblos y el planeta.